En la Entrada anterior nombramos las enfermedades y plagas más frecuentes: Hongos, Bacterias, Virus, Insectos y Ácaros. Cuando aparecen en nuestras orquídeas su tratamiento y erradicación es realmente difícil, sobre todo si hay muchas plantas o están en orquidearios, invernaderos o umbráculos, ya que en estos lugares unas condiciones de cultivo erróneas propician su rápida extensión lo que dificulta su control.
Así que lo mejor es prevenir su aparición. Algunas recomendaciones básicas serían:
1- Cuando compras plantas, presta atención a cualquier signo de enfermedad o presencia de insectos, caracoles, etc. No compres plantas en mal estado, deshidratadas, con partes rotas o desgarradas o con signos de cuidado deficiente.
2- Identifica tus plantas. Los híbridos comerciales comprados en viveros generalistas o en supermercados, suelen dar menos problemas porque la mayoría se adaptan a las mismas condiciones de cultivo, pero si compramos especies botánicas es fundamental saber cuáles son exactamente ya que cada una tiene sus propios requisitos de cultivo y si no los conocemos no podremos dárselos y enfermarán.
3- Evita las compras compulsivas. No mezcles especies de distintos entornos, sus diferentes necesidades de luz, temperatura, humedad, épocas de reposo y cultivo en general hacen imposible su cohabitación.
4- Colócalas en lugares adecuados a sus necesidades, no sirven todas las habitaciones ni todas las orientaciones ni son adecuados los mismos contenedores y sustratos.
5- No mezcles plantas de otros tipos, como las habituales de jardín, pueden ser vehículos de transmisión de algunas enfermedades y parásitos.
6- Cuando adquieras nuevas plantas déjalas unos días en observación antes de ponerlas con el resto. Si tienes la menor duda sobre su estado, dales un baño con fungicida de contacto.
7- No amontones las plantas, favorece la propagación y dificulta su observación y correctos cuidados y tratamientos.
8- Ten previsto la forma de atenderlas si tienes que ausentarte por viajes o vacaciones (automatismos, amigos, etc.).
9- Mantén el orquideario limpio, retirando hojas caídas, flores secas, y cualquier otro resto que puedan propagar enfermedades o dar refugio a huéspedes indeseables.
10- No reutilices sustratos. Lava y desinfecta las macetas y soportes y todos los materiales utilizados.
11- Utiliza siempre herramientas afiladas y desinfectadas cuando cortes o dividas las plantas.
12- No permitas que las hojas estén mojadas por riegos o pulverizaciones al atardecer.
13- Adecua la ventilación al nivel de humedad existente. Los ambientes muy húmedos y cálidos son un caldo de cultivo para hongos y bacterias.
14- Fertiliza adecuadamente, los excesos sólo producen crecimientos débiles, propensos a los ataques de las plagas.
15- Garantiza siempre un drenaje eficaz de los sustratos, la acumulación de agua en las raíces es siempre fatal.
16- No dejes agua en el cuello de las plantas, conduce a la pudrición del tallo de forma rápida. Evita el goteo de plantas colgadas sobre las que se encuentren debajo.
17- No riegues las dos primeras semanas las plantas recién trasplantadas o divididas.
18- Aplica siempre fungicidas en los cortes y en las raíces de las plantas trasplantadas.
19- En las épocas de aparición probable, utiliza fungicidas preventivos. Alterna los productos para no producir resistencia.
20- Utiliza automatismos para ventiladores, extractores y calefactores para evitar descuidos u olvidos.
21- En plantas muy infectadas utiliza productos sistémicos porque los de contacto no serán suficientes.
22- Corta y retira las partes afectadas lo antes posible y no dudes en eliminar plantas muy enfermas o con síntomas de virus.
23- Consulta a amigos, foros o cualquier persona que te pueda ayudar a identificar el problema y sus causas. Los tratamientos equivocados son difíciles de corregir.
SIEMPRE que utilices productos fitosanitarios sigue las indicaciones de preparación y/o aplicación al pie de la letra y utiliza siempre guantes y mascarilla. Usa sólo productos aprobados, en las dosis indicadas y específicos para las orquídeas. Sigue las recomendaciones para evitar contaminar el entorno y deposita los envases usados en los lugares habilitados para ello. No olvides que son productos tóxicos para tí, tu entorno y el medio ambiente en general.