Es indudable que las Vandas llaman la atención por su exotismo y belleza, con sus grandes y coloreadas flores, a menudo perfumadas, y sus largas raíces colgando libremente en el aire, sin sustrato. Las fotografías son de la segunda vara floral de esta planta.
La mayoría de las que podrás encontrar a la venta son híbridos de flores enormes, sobre todo en tonos azules, morados y púrpuras, pero también de otros muchos colores, lisas, moteadas o teseladas, situadas en pequeñas cestas de plástico sin sustrato, con larguísimas raíces al aire o en grandes recipientes de cristal también sin sustrato. Es probable que la planta que lleves para casa, aunque lleve la etiqueta de Vanda, sea alguno de los múltiples híbridos intergenéricos que se comercializan: Mokara, Vandaenopsis, Vascostylis, Ascocenda, Darwinara o cualquier otro de nombre impronunciable, pero no te preocupes, porque los cuidados son básicamente similares.
Para su cultivo necesitan un lugar cálido (el rango de temperaturas va desde los 15 a los 35 grados, aunque la franja intermedia es preferible, unos grados menos por la noche estimulan la floración) Colócalas en un lugar con mucha luz (evitando el sol directo del mediodía con un visillo o cortina ligera) y bastante humedad (al menos un 70%) y mantén siempre sus raíces húmedas con riegos frecuentes y pulverizaciones. Cuando las raíces están bien hidratadas, su color es verde claro brillante y a medida que se van secando toman el característico color gris plateado, por lo que resulta sencillo saber sus necesidades de riego. Si no dispones de un lugar con esas características, puedes cultivarla en una cesta con un sustrato a base simplemente de trozos de ladrillo y carbón vegetal, e incluso en un compost de cortezas de pino grandes y algún material de drenaje.
Otro modo, es mantenerla en el recipiente de cristal en que a veces vienen, proporcionando un baño de agua templada a las raíces cada cierto tiempo (una semana es orientativo, pero dependerá de la humedad de tu casa). Para ello echa agua sin cloro (fíltrala o déjala reposar un rato) hasta que cubra las raíces, deja la planta unos 20 minutos y luego escurre todo el agua, cada 4 riegos incorpora un poco de abono muy disuelto al agua. También puedes utilizar un abono foliar como refuerzo en ocasiones. Vigila el exceso de humedad y que no se pudra el cuello de la planta. Para reproducirlas se corta el ápice del tallo cuando es suficientemente largo y tiene varias raíces aéreas, como si fuese un esqueje tradicional o un keiki. En la parte seccionada aparecerá en poco tiempo una nueva yema y la planta seguirá creciendo. Dales una buena ventilación, soportan incluso corrientes de aire, ello ayuda a evitar infecciones fúngicas a las que son propensas, es conveniente un rociado preventivo periódicamente con un fungicida sistémico. Si las condiciones de cultivo son constantes, el crecimiento es contínuo todo el año y pueden repetirse las floraciones.
Recuerda que en la naturaleza las raíces de las orquídeas epifitas están adaptadas a los ciclos climáticos y los excesos (fuertes lluvias por ejemplo) se ven compensados con viento que seca el agua sobrante. En casa, en un invernadero o en un orquideario, tenemos que estar siempre atentos al estado de las orquídeas fijadas en soportes, porque una tarde de sol excesivo, un fallo u olvido en el riego o en la ventilación, pueden estropearlas, sobre todo las más pequeñas que apenas tienen reservas de humedad. Debemos asegurarnos de pulverizarlas con frecuencia y regarlas al menos una vez al día. Cada dos semanas podemos agregar un poco de fertilizante para orquídeas muy diluido al agua. Será suficiente para alimentarlas.
Se producen muchos híbridos intergenéricos, generalmente combinando Vanda Sanderiana o Vanda Caerulea, por la belleza y duración de su flores con otros géneros como: Aerides, Ascocentrum, Arachnis, Phalaenopsis, Renantheras, Rhynchostylis, Doritis, Neofinetias etc. y dan lugar a géneros con nombres como: Aranda, Ascocenda, Burkillara, Darwinara, Hagerara, Macekara, Moirara, Paulara, Sutingara, Vandaenopsis o Yapara, entre otros muchos. Algunos cultivadores sobre todo asiáticos, las reproducen a miles, por lo que la oferta es amplia, aunque suelen ser caras.
Ref: orchideasweb.com, wikipedia.org, infopedia.nl.sg., orchids.wikia.com, orchidweb.com
As vandas são surpreendentes pela forma de cultivo
ResponderEliminare floração.
Abraço.
http://eueminhasplantinhas.blogspot.com.br/
Sim, eles são realmente impressionantes orquídeas, obrigado por comentar Simone.
EliminarAbraço
Olá Angel,
ResponderEliminarParabéns pelo excelente cultivo e pela magnífica floração. As fotos também estão perfeitas e realçam toda a sua beleza. Híbridos ou não, são realmente plantas muito exóticas e exuberantes.
Um abraço
Muito obrigado Americo, por visitar e comentar . Fico feliz que você gostou da Vanda.
EliminarUm abraço